Nunca pensé que sería tan repugnante. Las náuseas matutinas son insoportables con decir que ni siquiera puedo tomar una cucharadita de té. Pero tengo que hacerlo, comer algo en las mañanas es indispensable para todo ser humano, más para mi y mucho más en mi estado, si no como me da fatiga y muchas más náuseas que de costumbre.

No quiero pensar en eso, no me quiero convencer de eso, no quiero que nadie se entere aunque es imposible porque al cabo de unos cinco meses se enterarán igual, no lo puedo ocultar pero no lo digo porque me da verwenza, esa es la verdad. No me enorgullece en nada, fue una metida de pata, yo no debería estar así. No es hermoso echarme a perder la vida y que todas mis expectativas futuras pasen a segundo plano. No es gratificante saber que fue concebido extramaritalmente, por lo menos para mi no "Yo quería cuando tuviera una argolla de oro en mi anular izquierdo". Pero ya las cosas están finiquitadas no hay nada que hacer solamente pensar positivo y hacerme el ánimo para salir adelante, no soy la primera y tampoco seré la última, pero me da pena, mucha mucha pena.

Unos me dicen que es una bendición, otros me dicen que me puede alegrar la vida que he llevado con tanto sufrimiento. Yo digo que el tiempo lo dirá porque en este momento no me alegra nada, lo único que hace es darme días asquerosos y nauseabundos.